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En nuestra sociedad actual la soledad está vista como algo incluso negativo, pero no tiene por qué. Cuando tienes todo lo que necesitas a tu alcance tu vida puede ser apasionante, y eso es lo que ha conseguido Foster Huntington al construir su casa en un árbol y una increíble bowl en lo que sería su jardín.
Foster dejó su trabajo en Nueva York y decidió apartarse de todo y vivir más tranquilo en el noroeste de los Estados Unidos (Washington), aunque con las mismas o más comodidades. Sigue teniendo Wi-Fi (e incluso 4G), tiene justo el espacio que necesita, no tiene problemas para aparcar, tiene un jacuzzi natural, unas vistas envidiables y además se ahorra dinero.
Muchos pensarán que ha hecho una inversión millonaria, pero la verdad es que tan sólo se ha gastado 170.000$ (poco más de 150.000€), es decir, una décima parte de lo que pide Rodney Mullen por su casa en California. El resultado, al menos visualmente, es más que encantador. Compruébalo tú mismo contemplando estas imágenes que tomó el mismo dueño, Foster Huntignton.
************ ENGLISH VERSION ************
In our society, loneliness is considered something even negative, but there’s no reason to think like that. When you have everything you need in your hands, your life can be outstanding. That’s what Foster Huntington achieved by building his house on a tree, and a huge bowl in what we would say its garden.
Foster quitted his job in New York and decided to live a quiet life in the Northwest of the United States (Washington), but with the same or even more facilities. He has Wi-Fi (and even 4G), he has all the space he needs, he doesn’t have any problem to park his car, he has a natural jacuzzi, an incredible views and moreover, he is saving money.
Many people will think he did a millionaire investment, but actually he only spent 170.000$ (a bit more than 150.000€) to make his dream true. That means he only spent a tenth part of what Rodney Mullen is asking for his villa in California. The result, at least aesthetically speaking, is awesomely cozy. You can check it by watching these images that Foster Huntignton, the owner of this treehouse, took when he built it.
