Patrick O’Dell lo ha vuelto a hacer. Cuatro episodios explicándonos a un Ali Boulala sobrio, por extraño que parezca, el «Baker» original rehabilitado.
O’Dell se pasa casi una hora hablando con Ali sobre los temas más peliagudos de su historia, como por ejemplo, coger una moto después de haber bebido con uno de sus mejores amigos (Shane Cross) que éste pierda la vida, y que él mismo esté en coma y no pueda volver andar al menos en el corto plazo. La relación infecciosa que tenía con Greco, el porqué de drogarse/beber… Mil y una historias contada por uno de los protagonistas más emblemáticos de la historia del patín.
Ha dejado toda una vida de excesos atrás, ha pensado en suicidarse por lo que ha hecho, ha estado en la cárcel, el cuadro de Shane Cross cuelga en su pared y tú deberías ver este documental.